El Trastorno de Personalidad es un patrón persistente de pensamientos, emociones y comportamientos que se desvían de las expectativas culturales, causando dificultades en las relaciones y el funcionamiento diario.
Se manifiesta en formas específicas según el tipo (por ejemplo, borderline, antisocial, obsesivo-compulsivo), con síntomas como inestabilidad emocional, impulsividad, desconfianza extrema o perfeccionismo rígido.
Las causas son multifactoriales, incluyendo genética, experiencias traumáticas en la infancia, abuso o negligencia, y desequilibrios neuroquímicos. Factores ambientales y sociales también influyen en su desarrollo.
La psiquiatría profesional aborda estos trastornos con tratamientos integrales. La psicoterapia, como la terapia dialéctica conductual (DBT) o cognitivo-conductual (TCC), ayuda a modificar patrones disfuncionales. En algunos casos, se complementa con medicación para controlar síntomas como ansiedad, depresión o impulsividad.
El apoyo continuo y la psicoeducación son clave para mejorar la calidad de vida y fomentar relaciones saludables. La intervención temprana y un enfoque personalizado son esenciales para manejar estos trastornos de manera efectiva.
Brinda un servicio de atención integral de los problemas emocionales con la aplicación de diversos enfoques, desde el nivel individual, grupal, pareja y familia. Actualmente desarrolla una línea de investigación en efectividad del modelo de Terapia Breve Estratégica en la Universidad Autónoma de Nuevo León.
"La salud mental no es un destino, sino un proceso. Se trata del viaje que tomamos cada día para cuidar de nosotros mismos y de los demás."